Figura de mujer, silueta en mi pared desnuda
mirada como el mar,
y piel con gusto a sal y atardecer.
Tú me abres el portal de un paraíso para dos,
donde no hay tiempo, solo tu y yo.
Bailamos sin hablar,
no quiero preguntar quien eres,
visión o realidad, que importa que más da!
si estas aqui!
Y como aquella vez me besas y luego te vas
sin despedirte regalandome una rosa.
Otra vez no te puedo detener
porque al amanecer me abandonas,
tu te vas y me quedo una vez más
suspendido en el fulgor de tu rosa
flotando en el color de tu rosa!
Bailamos sin cesar,
visión o realidad, que importa,
un beso y otro más
voy en la obscuridad siguiendote.
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Y sin decir adiós una vez más te perderas
y solamente quedará de ti una rosa.